El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó a Irán después de un ataque perpetrado el domingo contra la Embajada estadounidense en Bagdad, la capital de Irak.
Los cohetes lanzados contra la misión diplomática norteamericana cayeron en la Zona Verde fuertemente fortificada de Bagdad, causando algunos daños menores.
La mayoría de los proyectiles alcanzaron un complejo residencial y un puesto de control de seguridad dentro de la zona, impactaron en edificios y automóviles e hirieron a un soldado iraquí.
Trump respondió al ataque manifestando que "si un estadounidense es asesinado, Irán será responsable".
Por su parte, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, culpó del ataque a "milicias respaldadas por Irán".